1. Tener las relaciones para encontrarse los dos, y no para buscar un hijo.

2. Si os buscáis vosotros, encontrareis el hijo, si es que os conviene ahora, quizás vuestra naturaleza corporal esté hablando: buscaros, comunicaros, mirad como podéis tener mejor relación de pareja, compenetraros, volved a los detalles de cariño del enamoramiento, sed muy felices vosotros dos, y así el hijo vendrá sin más.

3. Tened las relaciones sexuales cuando más deseo tenga ella, aunque eso suponga hacer unos kilómetros.

4. El moco vaginal claro, elástico y lubricante como clara de huevo, es el momento más fértil de ella.

5. No tengáis relaciones sexuales diarias, sólo por buscar un hijo, pues la primera relación después de cinco días de abstinencia tiene una concentración espermática mayor.

6. Los hijos no vienen a solucionar los problemas de pareja.

7. La hipófisis se encarga de armonizar las hormonas, tanto en la mujer como en el hombre, en un diálogo maravilloso con los ovarios o con los testículos. Si nuestro cerebro tiene algún miedo, algún problema que arreglar antes de que venga el hijo, o algún bloqueo por conseguir el hijo a costa de todo, la hipófisis cierra el paso a las hormonas. Nuestra naturaleza corporal habla, ¡escuchadla! 

8. El hijo es un don de vuestra naturaleza y vuestro amor, no un derecho.

9. Si lo convertís en un derecho, vuestro hijo no será bienvenido, vendría a un hogar de derechos y no de amor.

Ana Vera y José Ortiz

Monitores de Planificación Familiar Natural